A finales de los años 70, los juegos de suerte, azar y apuestas dejaron de ser ilegales en España. La despenalización del juego quedó recogida en el Real Decreto Ley 16/1977, de 25 de febrero. Por el que se regularon todos los aspectos penales, administrativos y fiscales de los juegos de suerte, envite o azar y apuestas.
Ese régimen jurídico del juego que se mantuvo durante tres décadas, hasta la aparición de la Ley 13/2011, de 27 de mayo, de Regulación del Juego. Una nueva Ley del Juego necesaria para dar la respuesta a la realidad del mercado. Ya que la concepción tradicional del juego había cambiado debido fundamentalmente a la irrupción de los servicios de comunicaciones electrónicas y a la utilización de los servicios de juego interactivos a través de Internet.
Desde la legalización del juego en España en 1977 hasta la actualidad, la industrial de juego ha experimentado un gran desarrollo. Hoy en día, el sector del juego realiza una fuerte contribución tanto económico como social, ya que representa el 2,3% del Producto Interior Bruto (PIB) aportando más de 1.200 millones de euros a las arcas del Estado en impuestos específicos en recaudación por tasa de juego. Además de crear más de 120.000 empleos, según los datos de la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ). De esta forma, se trata de uno de los sectores que más están aportando de acuerdo a su actividad economía en nuestro país.
El sector del juego no ha parado de crecer exponencialmente desde que entró en vigor la Ley del Juego en 2012. Según los datos del Cuarto informe trimestral sobre la evolución del mercado de juego online, que corresponde al periodo de octubre a diciembre de 2019, elaborado por la DGOJ, el sector del juego ‘en España movió, en términos de cantidades jugadas, 4.978 millones de euros en el cuarto trimestre de 2019. Esta cifra supone un incremento del 149,5% respecto al primer trimestre de 2015, año en el que el organismo regulador del sector del juego en España publicó su primer informe. A pesar de este crecimiento, motivado principalmente por las casas de apuestas y los casinos online, como el casino de 888, esta industria también padeció la crisis económica mundial que comenzó en el año 2008.
La inversión en publicidad y patrocinios ha sido una de las claves del crecimiento de un sector del juego que alcanzó su máximo histórico en 2018 con 6.962 millones de euros. En los últimos años, el sector del juego ha intensificado su inversión en el deporte, especialmente porque España se ha convertido en un país con grandes oportunidades. No hay duda que el deporte supone un mundo de posibilidades para que las empresas conecten con audiencias globales, como ocurre con el caso del fútbol español. Por este motivo, no es de extrañar que el patrocinio deportivo a nivel mundial batiera su mayor récord de inversión en 2019, con casi 41.000 millones de euros de inversión principalmente por parte de las aerolíneas, la banca, los juegos de azar y la automoción, según puso de manifiesto un estudio elaborado por la agencia británica Two Circles.
La presencia del sector del juego en el fútbol
El crecimiento del sector del juego tiene su reflejo en el fútbol, considerado como el deporte rey por excelencia. La relación del fútbol con el mundo de las apuestas y los casinos no es de ahora, ya que es algo que surgió hace más de una década.
Sin embargo, fue en 2018 cuando las empresas de este sector siguieron la estela de Reino Unido, país que cuenta con una larga tradición de patrocinio deportivo de apuestas deportivas, e intensificaron su inversión en el fútbol español. En la temporada 2018/2019, de los 20 clubes que conforman LaLiga, 19 de ellos estuvieron patrocinados por operadores con licencia para operar apuestas deportivas y casinos online en el mercado nacional. La Real Sociedad fue el único equipo que no tuvo un acuerdo de esponsorización en esa campaña.
Esta tendencia se ha mantenido en la actual temporada 2019/2020. De nuevo, diecinueve de los veinte equipos de LaLiga tienen, al menos, un patrocinador relacionado con el sector del juego. Pero como hemos comentado anteriormente, esta circunstancia no es nueva, ya que este tipo de patrocinio deportivo penetró en el fútbol español en el año 2007 de la mano del Real Madrid. Desde entonces, el sector del juego se ha ido haciendo un hueco en el mercado nacional del patrocinio deportivo conquistando la mayor parte de los clubes de Primera División.
A pesar de que LaLiga ha escalado posiciones entre las grandes ligas con el patrocinio de los operadores de juego, la Premier League sigue liderando este segmento. De hecho, clubes como el Arsenal FC, el Leicester City FC o el Newcastle United FC tienen firmados acuerdos de patrocinio con varias empresas del sector del juego.
No hay duda que los operadores de casinos y apuestas van de la mano con los clubes de fútbol, pero no solo en España, sino en todo el mundo. Al fin y el cabo, el sector del juego se caracteriza por una gran competitividad en la actualidad, por lo que todas las empresas de esta industria compiten por la visibilidad de la marca. De esta forma, el deporte rey, especialmente LaLiga y la Premier League, se ha convertido en un gran escaparate para los operadores de juego. Ven en estas competiciones tan importantes un canal de visibilidad a nivel mundial.
Con todos estos ingredientes, el sector del juego se ha consolidado como generador de riqueza y empleo en España. Además, el crecimiento exponencial en la facturación de los operadores durante los últimos años ha incrementando la contribución fiscal de las empresas del sector. Y la inversión en patrocinios deportivos. Situando a esta industria como un firme sostenedor para la sociedad española. Todo ello a pesar del escaso volumen en cantidades jugadas de los españoles en comparación con la mayoría de países de la Unión Europea.
Fuente: lajugadafinanciera